Pues hombre Dr. Lakes, a nuestros caballistas les encantan los corvejones de vaca en los caballos, parece que poco les interesan las precisiones anatómicas que describen los académicos.
Para los aplomos del tren posterior, dicen los libros, que la posición del extremo inferior de las patas debe corresponder con las líneas verticales que descienden desde las puntas de los isquiones (la punta de las nalgas), esto daría que la mayoría de los caballos de nalga ancha serían unos "patiabiertos" como despectivamente son llamados por todos, incluidos los jueces, a todos les encantan los "ajustados".
Raúl Estrada al parecer mantuvo la controversia en su vida activa, en su libro le dedica buena parte de un capítulo a discrepar de esa preferencia (para él equivocada) de nuestros caballistas.
Para las manos, las líneas verticales se trazarían desde los hombros (extremos superiores de los húmeros) hasta el piso y deberían coincidir con la vertical de las manos. Siendo así, los caballos que presentan pechos anchos (para mi lo deseable), van exhibir manos abiertas en una proporción visiblemente mayor a la de las patas. El porcentaje de diferencia que anota me parece que corresponde con la gráfica de Raúl Estrada, pero si se trata de caballos ajustados, diría que la proporción es de 2 a 1, inclusive más.
Carlos Mejía