Como lo mencionaron anteriormente; existe mucha variabilidad entre yeguas. Pero la mayor variabilidad que existe, en mi opinión, es el manejo de la alimentación en cada finca. En los programas de transferencia de embriones que manejamos, el ideal es tratar de preñar las receptoras antes de destetarlas para que ya se puedan ir a las fincas de preñeces y no tengan que estar vacías y sin potro en las instalaciones de cría debido al espacio reducido. Pero también existen fincas en que la alimentación es precaria y perdemos mucho tiempo porque las yeguas algunas veces no hacen nisiquiera el conocido "Calor del Potro". Mi sugerencia es que si se quiere preñar las yegua durante su lactancia es de suma importancia la alimentación de la yegua durante su gestación y después en el postparto, las yeguas durante su lactancia entran en balance energético negativo, que debemos contrarrestar con una adecuada alimentación.
Si se tienen a pastoreo, tratar de convertirse en un agricultor, y tener forraje de excelente calidad, y si el tema es en pesebrera que estén lo mejor alimentadas posibles.
Con un buen manejo alimenticio, preparto y postparto, un gran porcentaje de yeguas logra ciclar durante toda su lactancia. Sin interferir en las tasas de fertilidad.
Saludos
Ernesto