En este asunto creo pertinente un llamado a la objetividad, es necesario para el análisis de este asunto tan delicado, contar con la información completa incluyendo las normativas aplicadas, es lo mandado.
Presumo, aunque sea difícil, que la buena fe está presente, tanto en los sancionadores como en los sancionados, con la información suministrada en este tema, no me parece suficiente para absolver a unos y condenar los otros.
Como estamos con los sancionados en esta orilla del foro, las tendencia de todos, también la mía, es hacia la solidaridad de cuerpo, lamento las sanciones a Lmaría y al Dr Pablo, uno siente que su compromiso con el CCC no merecería que recibieran estos tratos.
Intuyo que las sanciones se apoyan en alguna normatividad, que intentando adivinar, compromete a los que forman parte de un organismo rector, a tener ciertas restricciones en cuanto a sus manifestaciones públicas relacionadas con los asuntos propios de dicho organismo.
Invito pues a los más informados, a que nos cuenten algo sobre la normatividad aplicada a estos ilustres sancionados.
Fedequinas, más para bien que para mal, nos representa, y las equivocaciones que le señalemos desde el foro, que es la calle, deberían contar con el respaldo dialectico suficiente que nos haga respetables contradictores.
Carlos Mejía