Este debate de la reducción de la junta directiva de Fedequinas es bastante adulto. Tiene varios años y así como es de viejo, es también absurda la forma en que desde el altiplano, occidente y Antioquia, se ha querido implementar la tan nombrada reducción. Y digo absurda porque pretenden implementarla sobre la base de atropellar los derechos de los asociados pertenecientes a asociaciones pequeñas y a las mismas asociaciones pequeñas, ya que anti democráticamente, pretenden basar la representatividad en cantidad y no en la calidad. Se quiere establecer unas categorías de socios y de asociaciones, que no solo es anti democrática, sino excluyente y discriminatoria. Quien dijo que por tener mas caballos y/o registros, una asociación debe tener mas representatividad que otra? Eso es odioso. Tan caballistas somos los caribes, como los santandereanos, los boyacenses, etc., como lo son quienes están en Cundinamarca, Antioquia y el Valle de Cauca, tenemos la misma raza, los mismos caballos, pagamos igual o mas que los demás, usamos los mismos reproductores, vamos a las mismas ferias, registramos igual que los demás, entonces por que pretenden que para ello seamos iguales, pero para la representatividad no? O todos en la cama o todos en el suelo. No estoy de acuerdo con la reducción del número de miembros de la junta, que tenga como fundamento el desconocimiento de los derechos de ninguna asociación del país.
Ojalá este debate, en vez de girar en torno a una cuota de poder, girará en torno a lograr la eficiencia de un cuerpo colegiado que toma desiciones trascendentales en todo lo atinente a la cría, registro, exposicion, etc., del Caballo Criollo Colombiano.
Buen día,
Enrique M. Charris Gonzalez
Criadero La Ley