Yo soy criador de Trocha pero siempre me ha gustado el Paso Fino Colombiano.
Hace un par de años tuve una hija de Amadeus y una hija del Atrevido que produjeron crías de calidad aceptable pero no sobresalientes.
El año pasado quise reiniciar con 2 yeguas y luego llegaron otras 2 en compañía; los animales los tengo para cría pero también para cabalgatas y disfrutarlos y esta labor es imposible con animales de mal genio; son indeseables, no trasmiten buena energía y son un peligro para quien los monta y para quien trabaja con ellos.
Un herrero de Jamundí ya pregunta que raza tienen los animales para los cuales lo van a contratar para herrar, pues una yegua hija de un célebre reproductor le pegó un manotazo y estando en el piso siguió agrediéndolo y no pudo trabajar por un par se semanas.
Una de las yeguas yo que tenía hizo un extraño y lastimó a un amigo, por eso decidí dejar solo una yegua de cría que es hija de Dulce Sueño en Galilea (Galán de Las Guacas x Alabanza, madre de Dulce Miel) y una potranca que tiene de 6 meses hija de Prestigio.
Analizando la mayoría de finos con mal temperamento se evidencia que tienen alta consanguinidad y se han cruzado hermanos, tíos, sobrinos, abuelos por casi 20 años y se ha logrado prepotencia y uniformidad en temas como fenotipo, color, tamaño de orejas, ojos separados, cuero muy fino, y muchas otras condiciones de clase en los animales, pero también el genio difícil.
Este genio no solo se observa en el proceso de arreglo y posterior uso bajo la silla, sino también para palpar las yeguas, montar en camiones, herrar, inyectar, purgar, etc.
Con una sola yegua criando no llego a ser la décima parte de un grano de arena, pero si logré aceptar la realidad de la calidad que se ve hoy en día en competencias, pero no es posible ingnorar que en términos generales los finos en su mayoría son bravos.
La yegua que tengo es fina, tiene un temperamento aceptable para el promedio sin ser la mas mansa, empieza a mascar el freno y ahí toca pararla, darle un círculo y seguir la marcha, o de lo contrario se prende demasiado; yo creo que por su brío en su momento la quisieron reunir mas de la cuenta y la yegua no maduró ni tuvo la constancia ni paciencia en la última etapa de su arreglo. Logró 2 cintas en exposiciones grado B estando jóven y sus 2 primeras crías que tienen en otro criadero han logrado 2 y 3 cintas respectivamente.
Esta yegua tiene líneas de Zodiaco, Capitán, Capuchino y Símbolo del 8, pero debo usar un caballo que sea bastante manso, de fácil manejo y que además tenga crías de buen temperamento.
Estudiando la amplia gama de reproductores, se hace una lista que difícilmente llega a los 10 animales que hayan trasmitido buen temperamento a la mayoría de sus crías. Es demasiado importante refrescar líneas y es urgente dejar de usar caballos bravos.
Me decidí por Jordan de JN que es un caballo con una finura exquisita y natural, excelente temperamento y lo mas importante ya demostró que trasmite esa calidad y mansedumbre a sus crías.
No se trata de ninguna publicidad pues no tengo participación ni sociedad con este caballo, pero así como he manifestado en varias ocasiones que el Paso Fino Colombiano tiene demasiados animales con mal genio a pesar del gran nivel de calidad que se ha logrado, también debo manifestar que un caballo fino y manso es demasiado especial, valioso y es el verdadero caballo de silla que debe mostrarse a otros países.
Así como hay disciplina para utilizar reproductores en términos de pisada, aplomos, colores, tamaño, brío, raza, finura, nivel de elevación de miembros, entre muchos otros factores, siento que en muchos criaderos se les ha olvidado y han pasado por alto algo tan fundamental como es la mansedumbre y nobleza que debe ser obligatorio en caballos criados con el propósito de ser de silla.