Autor Tema: EL arte de montar  (Leído 6232 veces)

Desconectado idac30

  • Sr. Member
  • ****
  • Mensajes: 317
  • Ivan Arbelaez C
    • Email
EL arte de montar
« : Abril 08, 2008, 11:42:25 am »
Cordial saludo amigos Foristas quiero compartir con ustedes este articulo que salio en la revista fedequinas No 49 que se llama "El arte de montar"

Edición No. 49 - "EL ARTE DE MONTAR"

--------------------------------------------------------------------------------
 
Hay tres factores determinantes para una buena y placentera ejecución del andar del caballo:


1. Fuerza en las piernas
2. Suavidad en las manos
3.Oído en el culo (apreciados lectores, disculpen el uso de este vocablo “vulgar”, pero es la forma ancestral para describir el sentido de oído en la cadera).


1. Fuerza en las piernas: al ejercer fuerza con
las rodillas y cadera, se estimula al caballo para que aumente el ritmo y cadencia (cadencia: medida del ritmo... un ritmo es suave, cuando es cadencioso).


2. Suavidad en las manos: con la suavidad en las manos regulamos gradualmente la magnitud del desplazamiento, buscando la total armonía en el andar con base en el ritmo y cadencia logrados con los estímulos impartidos con las piernas (rodilla) y cadera (al ejercer fuerza con la cadera en la silla se hace presión en los riñones del ejemplar, estimulándolo a aumentar el ritmo y longitud de desplazamiento).


3. Oído en el culo: es decir, sincronizar por medio de la cadera el sentido del oído sonoro con el del movimiento que se siente a través del cuerpo del jinete, o sea, la forma de sentir el ritmo del caballo, de manera que se logre la mejor cadencia y ritmo, según cada andar, y mantener la igualdad de los tiempos del movimiento.


Para lograr un buen resultado final es necesario que el ejemplar posea tres factores fundamentales:
1. Buen brío.
2. Buen arreglo de boca
(bien arrendado o adiestrado).
3. Buen temperamento.
Cada aire o andar (Paso Fino, Trocha Pura, Tochador con Galope reunido y Trotón Galopero) requiere ciertas pautas o formas de manejo para lograr la estabilidad, armonía y continuidad en el andar con el mejor ritmo y cadencia posibles, utilizando las ayudas antes descritas, o sea, fuerza en las piernas, suavidad en las manos y oído en el culo. Cuando se monta un caballo Paso Fino se pueden aplicar a la vez las ayudas de apretar las piernas o cadera y recortar la longitud del desplazamiento por medio de las riendas, sincronizando el ritmo y cadencia por medio del oído, bien sea sensible al movimiento captado por la cadera o sonoro, al escuchar el taca-tacataca-taca característico de este andar.

El Paso Fino es un andar o aire de cuatro (4) tiempos en laterales, o sea, que se desplaza por bípedos laterales sucesivos y alternos marcando dos (2) tiempos con cada bípedo lateral para completar el paso en cuatro (4) tiempos.


El caballo de Paso Fino reacciona positivamente ante estas ayudas, mejorando, según el grado de experiencia de su jinete, su andar con mayor ritmo y cadencia, claro está, recortando (colectar) la magnitud del desplazamiento hasta donde la quietud del anca
lo determinen, pues la quietud del anca es la que
demuestra la suavidad del movimiento y armonía en el andar.


 

--------------------------------------------------------------------------------
 
Cuando se monta un caballo Trochador, bien sea Trocha Pura o Trochador Galopero, nunca se deben utilizar a la vez la presión de piernas o cadera y el recorte del desplazamiento, pues esto hará que se afine, produciendo la “habilitación” del ejemplar (habilitar: crear una imagen falsa del andar, en otras palabras, debido a la conducción hábil o defectuosa del jinete o chalán, hacer que el caballo marque un andar o aire que normalmente no ejecuta), o sea, se sale de la modalidad o andar genéticamente heredado. En el caballo Trochador en sus dos (2) modalidades (Trocha Pura y Trochador Galopero) se debe recortar el desplazamiento en el ejemplar de ritmo rápido y
desplazamiento largo y aflojar la presión con las piernas y cadera (cuerpo relajado), con esto se logra pulir el ritmo y aumentar la cadencia al recortar la longitud del desplazamiento.
En el ejemplar Trochador de desplazamiento corto y ritmo lento se deben apretar las piernas y hacer presión con la cadera para aumentar la ejecución del ritmo y cadencia, y aflojar un poco las riendas para aumentar la longitud del desplazamiento. Pero nunca se deben de hacer las dos ayudas juntas. Su sonido característico es tras-tras-tras-tras-tras, y también es un aire de cuatro (4) tiempos, pero en diagonales, lo que quiere decir que se desplaza en forma sucesiva y alterna con sus bípedos diagonales, marcando dos (2) tiempos con cada bípedo diagonal, para terminar el paso en cuatro (4) tiempos.
El caballo Trotón Galopero se debe montar de la misma forma que el caballo Trochador, pues si se aplican todas las ayudas antes mencionadas, este reaccionará negativamente entrando en la trocha habilitada, pues el andar del trote es de cadencia medianamente lenta y de desplazamiento corto y es de dos (2) tiempos, o sea, que lo ejecuta al desplazar en forma continua y alterna sus dos (2) bípedos diagonales, produciendo un tiempo en cada uno y completar el paso en dos (2) tiempos.
Su sonido característico es tas-tas-tas-tas-tas. El galope es un ritmo de cadencia lenta y desplazamiento largo (no rápido, pues sería carrera) y es de tres (3) tiempos, o sea, un tiempo lo ejecuta con una
 

de sus patas, el segundo por el bípedo diagonal a esta, y el último o tercer (3) tiempo lo marca con la mano diagonal a la pata con la que inició el primer tiempo, esto hace que a nuestro oído se escuche el característico ca-tor-ce, ca-tor-ce; ca-tor- ce; ca-tor- ce.
El galope es un aire o andar que requiere mucho oído, pulso y coordinación del jinete–caballo, pues para que haya una total armonía en el cambio del trote al galope o viceversa, el jinete tiene que elegir la mano con la que el caballo empieza el galope.
El jinete o chalán debe estar relajado y ordenar por medio de las riendas, en coordinación con una leve orden impartida por la cadera, a que el caballo inicie el galope, y en cuestión de segundos, seleccionar la mano con la cual va a galopar el caballo, y él automáticamente inicia el galope con la pata contraria, o sea, con la pata diagonal a la mano elegida.
Si no existe esta coordinación, el caballo se confunde y galopa sobre la mano contraria a la deseable, produciendo una descoordinación caballo-jinete, esto se siente y se ve, sobre todo, en los giros, donde observamos y sentimos que el caballo gira hacia adentro, pero galopa con la mano de afuera, y es consecuencia de que no se hizo el cambio de mano en el momento de cambiar de dirección. Esta teoría es totalmente aplicable en el Trochador Galopero, se monta y se maneja en la trocha como tal, pero cuando se va a galopar se debe coordinar este aire o andar, como se explicó para el galope en el Trotón Galopero.
 

Revista fedequinas No 49

Ivan Arbelaez.
Ivan Dario Arbelaez Cardona