Hablar de que el coliseo es pequeño no tiene cabida ahora. Cuando se entregó la mundial se sabía claramente sobre la capacidad real con que se contaba y de la noche a la mañana no se iba a construir el Maracana. Es mejor hablar de lo que sí se puede mejorar para próximas ocasiones, por ejemplo, nacionales y grado As:
(1) Si bien hay limitaciones de espacio, es muy importante maximizar el número de personas en los eventos, máxime el tamaño de la afición en el eje cafetero y el tamaño del evento mismo, así represente menores ingresos. Esto es un espectáculo para llevar a la familia y eso no va a suceder si toca comprar un palco o, alternativamente, levantarse a hacer fila a la 5am. No puede ser que más de la mitad del espacio sean palcos, así haya sido lo mejor estar en uno..
(2) El hp ruido. Entre el locutor, Jorge Celedón y Vicente Fernandez vuelven loco al que sea. El que quiera música que lleve un Ipod o se monte a un carro. Es un evento muy largo y lo único que uno quiere es que le digan el nombre de la categoria, el nombre del caballo, quién lo monta, quién lo crió y quién es el dueño, no más. Los alaridos, la historia del caballo criollo, cómo somos todos hermanos, Bolívar, entre otros, se los regalo. Eso sobra y son precisamente esos momentos donde se descansa de cinco días de caballos por, como mínimo, ocho horas..
(3) Los comites de aplausos y los "otros" eventos. Uno va a ver caballos criollos, no frisones, no frijoles, no mulas, no burros; no va a escuchar discursos de políticos, ni a ver cómo se condecora unos a otros. Si quieren hacer eso que lo hagan a las 5am mientras que la gente hace fila para entrar, no en el prime time..
(4) Los precios. La gente se aprovecha de los extranjeros y de los güevones. Penoso que le traten de cobrar cuatro mil por una caja de chicles, para después bajar a tres mil y más tarde, dependiendo de la emputada, a dos mil. Debería haber una lista de precios publicada para evitar abusos.
En general, un buen espectáculo, con competencias con caballos que difícilmente vamos a ver de nuevo juntos. No obstante, no podemos dar papaya y los americanos nos llevan años en organización. Hay que ser más profesionales y salirse de la idea que una mundial es una grado A grande.