Si bien es cierto que no se puede modificar el brío natural del caballo, en algunos casos se pueden obtener buenos resultados, (dependiendo esto de diversos factores), trabajando en el mejoramiento de la voluntad de trabajo y el fondo o resistencia del ejemplar, para mejorar la voluntad de trabajo, entre múltiples maneras se encuentra una, que cociste en realizar ejercicios de entrenamiento usando ayudas como; sonidos, fuete, contacto,entre otras, el objeto o la manera de llamar la atención del ejemplar se selecciona dependiendo a la respuesta que el mismo presente.
Estos trabajos reflejan resultados a mediano y largo plazo, entendiendo que se debe realizar un manejo prudente para no generar malestar o respuestas negativas que conlleven a vicios o defectos.