El pasado Spectrum nos demuestra una vez mas que la idea del modelo de paso fino que quiere el mundo es el criollo colombiano, demuestra también que el fenómeno de la extrema colección (caballos parqueados) se relaciona mas con los fundamentos de la monta puertorriqueña y americana que con una selección genética de caballos "parqueados" es decir, hay ejemplares que nacen con la capacidad de aprender a ser retenidos, pues ninguno de ellos nace naturalmente caminando en un solo punto, esto es aprendido mas no heredado genéticamente, así como se les enseñan a los caballos Árabes, Lipizanos, Portugueses y Españoles, los nuestros son entrenados para hacer un piafé criollo muy particular.
Una prueba de ello es que los "amigos del Norte" (como peyorativamente han querido llamar a los norteamericanos, boricuas y dominicanos al hablar del tema) siguen castando, premiando y delirando con nuestros reproductores colombianos que representan el modelo más criollo de nuestro andar, Tormento, Dulce Sueño, Bribón, Capitán, Vitral, a los que les ponen ¡ eso si ¡ su modo particular de arreglo y altísima exigencia física, a la que nuestra raza criolla es capaz de responder con solvencia. Buscar respuestas profundas al tema del "parqueo" en la genética es buscar "el muerto río arriba" pues su incidencia en el fenómeno es ínfima comparada con la influencia del tipo de doma.