Noticias Generales | Julio 07, 2020

El caballo y el sueño

SC
Por: susCaballos

Sin duda la importancia de un buen descanso y un sueño adecuado es fundamental para el bienestar de nuestros caballos.

La calidad y cantidad del sueño afecta directamente a la salud y bienestar del caballo, sin embargo, rara vez se tiene en consideración en un plan de entrenamiento por ejemplo.

Los caballos que duermen bien, que no sufren trastornos del sueño y mejoran la calidad del sueño está demostrado que ganan peso, tienen una mejor actitud, son menos agresivos con otros caballos, rinden más, etc.

Hay que tener en cuenta de que a pesar de que los caballos pueden dormir de pie, de esta forma no pueden dormir profundamente, por lo que el sueño yaciente o tumbados es esencial para su bienestar. A continuación abordaremos todas las claves sobre el sueño de los caballos y qué podemos hacer para mejorar su bienestar con unas sencillas pautas.

CÓMO DUERME UN CABALLO

Debido a la genética del caballo y a su ancestral instinto de defensa (no debemos olvidar que en libertad son animales de presa) el caballo a pesar de pasar tiempo aparentemente dormidos, están en realidad en estado de alerta por lo que es difícil determinar cuántas horas duermen.

Lo que si sabemos es que esta cantidad varía mucho en función de la edad que tengan, los más jóvenes duermen más que los adultos. Pero en general duermen aproximadamente lo siguiente:

Potro: descansa media hora de cada una que hay al día.

A partir de los seis meses: 15 minutos por hora.

Adulto: 3 horas repartidas a lo largo del día.

Varios estudios han demostrado que los caballos estabulados tienen un tiempo total de sueño regular de tres horas y media por la noche: el sueño REM es de 30 minutos (15% del tiempo total de sueño); el de ondas lentas, un 65%; y el resto del tiempo de sueño se gasta en el sueño ligero. Por eso, si los caballos no se acuestan, existe una deficiencia del sueño REM o pueden alcanzarlo estando de pie, pero se pueden colapsar por la relajación muscular asociada y, como consecuencia, sufrir lesiones graves.

¿Por qué los caballos duermen de pie? Para evitar ser presa fácil, los caballos han desarrollado un sistema anatómico en la extremidad que se mantiene en tensión. El aparato recíproco de sostén les permite mantener la extremidad extendida sin apenas esfuerzo gracias a una combinación de tendones y ligamentos perfecta. De tanto en cuando los animales alternan la pata extendida con la flexionada.

Los caballos pueden lograr las etapas del sueño uno (sueño ligero) y dos (onda lenta o sueño profundo) mientras están de pie, pero la tercera etapa (la fase REM, de movimientos oculares rápidos) se alcanza solo cuando el caballo está tumbado, ya que requiere de una relajación muscular elevada.

Habitualmente, cada día requieren de 15 minutos de sueño paradójico yacente, de la fase REM, pero pueden aplazar estos minutos, al contrario que otras especies. Es decir, pueden estar privados del sueño yaciente durante dos semanas antes de empezar a mostrar señales clínicas, como la caída con recuperación parcial o el volver a ponerse de pie.

PROBLEMAS PARA DORMIR

A continuación presentamos algunas de las principales patologías del sueño que se pueden presentar en nuestros caballos:

  • Por dolor o molestia física. Se trataría de caballos diagnosticados con una enfermedad grave articular, enfermedades músculo-esqueletales, úlceras gástricas etc.

  • Por inseguridad del entorno. Serían caballos que concilian el sueño cuando cambian los problemas del entorno, como el tamaño del lugar de estabulación, el sitio donde viven, otros caballos o animales con los que convive, la iluminación artificial, el uso de mantas, la climatología u otros factores ambientales.

  • Por monotonía. Estos caballos muestran trastornos del sueño solo cuando se les obliga a estar de pie sin moverse por periodos de tiempo prolongados. La estimulación intermitente simple ayuda a resolver este comportamiento.

  • Por fijación agresiva. Incluye a los caballos que muestran una agresividad excesiva y continua hacia uno o varios de los caballos del grupo. Pueden dejar este comportamiento al incorporar una yegua de carácter fuerte.

  • Por la enfermedad de Lyme. No dan muestras de dolor articular y responden positivamente al tratamiento de esta enfermedad.

  • Por terror nocturno. Se trata de caballos que tienen un comportamiento similar al de las personas con terrores nocturnos.

LA CAMA

Antes de instalar a su caballo en el establo es preciso que coloque algo sobre el suelo, proporcionándole así una cama sobre la que descansar.

A pesar de que muchos caballos pasan largas horas de pie, incluso cuando se encuentran descansando, no podemos por ello obligarles a permanecer siempre así, puesto que a la larga resultará inevitable que sus extremidades terminen sufriendo problemas.

Tumbados, los órganos internos descansan mejor, desarrollándose adecuadamente.

Las consecuencias de la falta de descanso adecuado pueden ser muchas y de muy diferente calibre; algunas de las más habituales son:

  • Hinchazón de piernas.

  • Fatiga constante (por la falta de recuperación tras el esfuerzo).

  • Lesiones en los codos, en los corvejones y en general en cualquier articulación.

  • Pérdida del estado físico.

  • Pérdida general de salud.

Además del necesario descanso, una cama cómoda es obligatoria por razones higiénicas.

Efectivamente, el caballo debe pasar largas horas en el box y necesita tener bajo sus pies un material que absorba la humedad del estiércol y deje fluir la orina; en caso contrario las infecciones estarán a la orden del día.

Si decidimos utilizarla resultará imprescindible que busquemos una paja de buena calidad. Preferiblemente optaremos por paja vieja, que puede resultar más blanda.

La paja es una magnífica opción puesto que ofrece unas buenas características de drenaje, con lo que los posibles residuos se eliminan fácilmente.

En cuanto a las distintas variedades, la paja de trigo ha demostrado ser la mejor opción, por su color y olor. Ésta deberá ser de color dorado y claro, seca y crujiente, nunca grisácea, húmeda o mohosa. También funciona bien la de avena, aunque cuenta con el inconveniente de que muchos caballos tienen tendencia a comérsela, por lo que desaparecerá rápidamente.

Otra opción es la paja de cebada, si bien cuenta con aristas punzantes que pueden irritar la piel del caballo (sobre todo si se trata de un pura sangre, que cuenta con una piel especialmente sensible). Además, se trata de una paja comestible, con el inconveniente de que puede producir los temidos cólicos.

Tenga en cuenta que la cama debe realizarse cada día, para lo cual seguiremos los siguientes pasos:

  • Amontonar la paja limpia contra las paredes del box.

  • Remover la parte sucia con el horcón y cargarla en una carretilla.

  • Barrer bien el fondo.

  • En caso de que el fondo esté húmedo, dejaremos que seque durante un rato.

  • Volvemos a colocar la paja, añadiendo nueva hasta recuperar el espesor deseado.

  • Si la paja tiene polvo, deberá pulverizarla con algo de agua o creolina.

  • Al menos una vez a la semana se debería desinfectar el fondo con un poco de creolina diluida en agua.

EL TAMAÑO CORRECTO

Ya sea en un establo abierto o en un box individual es fundamental que los caballo dispongan de espacio suficiente para tumbarse. En este sentido cuanto más grande mejor. Para calcular las dimensiones mínimas para boxes individuales emplee la siguiente fórmula: (2 x altura de la cruz) Para un caballo de sangre caliente con una cruz de 1,60 metros hacen falta por lo menos unos 10 metros cuadrados.

En el caso de que no sean individuales hay que tener en cuenta que los caballos cuando se tumban suelen mantener una mayor distancia de separación entre sí que cuando descansan de pie. Esto se debe al instinto de huida de estos animales. Por tanto si el espacio es demasiado pequeño para ellos suelen quedarse de pie.

EL SUELO ADECUADO

El suelo más adecuado para confeccionar la cama de ser antideslizante, seco y acomodadizo. Los caballos prefieren lechos de materiales naturales. Sobre todo suele gustarles la paja y ése es el material que más se emplea en los boxes individuales. Sin embargo si se emplea paja como material de cama en el establo abierto en seguida se puede convertir en un problema y perturbar el descanso de los caballos.

Si hay paja en la zona donde se echan los caballos y no quedan claramente delimitadas las zonas de comida y descanso puede llevarles a confusión.

Una alternativa puede ser las esterillas de goma blanda que demuestran ser muy eficaces en los establos abiertos. Hora bien, hay que cubrirlas por ejemplo con virutas ya que los caballos prefieren tumbarse sobre un suelo que se adapte a su anatomía. Los caballos suelen tumbarse sobre suelos secos en el prado y se acuestan de mala gana en suelos muy duros o fangosos.