Aprendiendo de Caballos | Marzo 21, 2019

El “Slowfeeder” o Red de Alimentación Lenta

SC
Por: susCaballos

Ayudan a eliminar la ansiedad

Ayudan a eliminar la ansiedad. Se eliminan las conductas de estrés y los conflictos entre ellos por la comida.

Todos hemos oído hablar de lo práctico y beneficioso que es instalar un sistema de alimentación lenta a nuestros caballos. ¿Pero qué es y qué debemos tener en cuenta cuando decidimos probarlo? ¿Qué factores pueden ayudarnos o, por el contrario, hacer del cambio una experiencia negativa? En el siguiente artículo podréis encontrar recomendaciones para todos aquellos que ya os lo hayáis planteado, e información detallada para los que no sepáis exactamente de qué se trata.

¿Qué es un “Slowfeeder” o Red de Alimentación Lenta? Para describirlo de una forma rápida, un “slowfeeder” es una red en forma de bolsa en la que colocamos el forraje de nuestros caballos para que puedan gestionar adecuadamente la cantidad de comida que ingieren y que ayuda a regular la velocidad en que lo hacen.

¿Qué beneficios tienen los “slowfeeders”?

Mejoran la digestión de nuestros caballos, procurando que dispongan de la misma cantidad decomida durante más tiempo. Así se respeta su metabolismo, de forma que le ayuda a ingerir el forraje en menor cantidad durante todo el día y se reduce muchísimo el riesgo de cólicos.
Ayudan a eliminar la ansiedad. Al tener forraje disponible a todas horas, no sufren por quedarse sin el,  dejan de esperarlo y de comer con ansia. Se eliminan las conductas de estrés y los conflictos entre ellos por la comida.
Conservan el forraje, no se desperdicia y se mantiene limpio. No se esparce por el paddock, se mantiene protegido del orín, no se vuela, etc.
Te permite procurarles comida durante uno o más días, según tus necesidades. No te preocuparás más por si se quedan o no sin forraje mientras estás fuera.

¿Qué requisitos debe cumplir un buen “slowfeeder”?

Debemos recordar siempre que los productos fabricados específicamente para caballos, tienen que estar hechos con un material resistente. Habitualmente muerden la red para conseguir la comida, y, si el material es débil, se romperá obligándonos a coser la cuerda rota, a atarlo con bridas, y demás inventos que al final volverán a ceder. Así que es muy importante que la cuerda de la red sea gruesa y fuerte, a la vez que suave para que no roce el hocico de nuestros caballos. Además, las costuras deben estar reforzadas y tiene que ser una red para uso en exterior, ya que deberá resistir a las inclemencias del tiempo. Otra recomendación es que el tamaño de la malla sea de aproximadamente 4,5cm. Este es un tamaño ideal para que el forraje salga con cierta dificultad de la red para asegurar una ingesta más lenta y, además, asegurará que ningún caballo o poni pueda introducir los cascos y quedarse enganchado con riesgo a lesionarse.


¿Qué hay que tener en cuenta antes de usar “slowfeeders”?

En primer lugar, no deben usarse con caballos herrados porque pueden engancharse en la herradura causando daño al caballo. Puedes proteger a tu caballo herrado, colocando la red dentro de una caja y asegurándote de que no puede alcanzarla con manos o pies. En segundo lugar, es básico analizar el entorno del caballo para averiguar el número de redes o el tamaño de red que necesitas. Y en tercer lugar, hay que tener claro el objetivo que tenemos para las redes, es muy importante consultar con un profesional que nos aconseje sobre cómo usar los “slowfeeders” para que los resultados sean positivos, tanto para nuestros caballos, como para nosotros. Tanto el entorno del caballo como nuestro objetivo para las redes, puede cambiar por completo el tamaño o número de redes que necesitaremos. No es lo mismo adquirir un “slowfeeder” para un caballo que tenemos sólo en un paddock pequeño, al que queremos distraer ofreciéndole la opción de tener comida durante todo el día, o adquirir uno para un grupo de caballos que tenemos en un campo grande y queremos que la comida les dure una semana para no tener que repartirla cada día.


¿Cuáles son los factores variables en el uso de los “Slowfeeders”?

Ante todo, debemos asumir que todos los caballos son distintos, todos los grupos de caballos se gestionan de forma diferente, los entornos y rutinas varían y las épocas del año también. Así pues, hay varios factores que afectarán en el aumento o disminución de cantidad de ingesta de comida, en la amortización del forraje o en la afectación emocional de los caballos:

En invierno comen más y en verano comen menos: a lo largo del año, notaremos variaciones respecto a lo que duran llenos los “slowfeeders”. Es normal que los caballos coman más cuando hace frío o llueve, y coman menos cuando llega el calor.

Los primeros días comen mucho: cuando los caballos no están acostumbrados a disponer de comida durante todo el día, lo normal es que la primera vez que usen la red se enganchen a ella y no paren de comer. No hay que preocuparse, es normal. Al poco tiempo, verás que ellos solos se regulan y dejan de preocuparse por si se acabará o no la comida. Ahora bien, cuanto más variado sea su entorno, menos necesidad de comer tendrán. Si el “slowfeeder” es su única distracción, es normal que pasen la mayoría del día junto a él.

Hay que prensar el forraje: al llenar las redes, hay que tener en cuenta que cuanto más prensado esté el forraje, más cabrá y más días durará. Todos los ejemplos los he puesto suponiendo que rellenamos con bala pequeña o bala grande. Si por el contrario, llenamos las redes con forraje suelto, hay que prensarlo mucho, o bien saber que necesitaremos más redes, o que durarán menos horas llenas.

Por muy resistente que sea el “slowfeeder”, debe recibir el trato adecuado: Si usamos redes pequeñas o medianas, podemos colgarlas para que no estén en contacto con el suelo. Pero no debemos hacerlo con redes grandes (a partir de los 3m). El peso de la red sumado a la tensión de las cuerdas, puede provocar que se desgaste muy rápido y se acabe rompiendo al rasgarlo el caballo con los dientes. El consejo es: colgar las redes pequeñas/medianas para que no estén en contacto con el suelo y podamos evitar que el forraje se ensucie si ha llovido, y elevar las redes medianas/grandes utilizando neumáticos o troncos, para que reposen sin tensión y sin estar en contacto con el suelo.

Los caballos gordos, adelgazan y los delgados, engordan: al tener forraje durante 24h al día, los caballos acaban auto regulándose y  habitualmente, los que comían con ansiedad se relajan, volviendo a su peso adecuado y los que eran los últimos en comer y siempre estaban apartados, volverán a comer con normalidad ganando el peso que les faltaba. Eso no significa que en caballos que viven solos, que no tienen espacio o distracciones, o que no trabajan de forma regular, pueda pasar que aumenten su peso. En este caso, la red o redes pueden colocarse dentro de una burbuja que podamos abrir y cerrar, para limitar el acceso a ellas durante algunas horas del día.


Lo más importante es saber que existen infinitas opciones para cualquier caballo, sea cual sea su entorno o situación. Hay que informarse bien y no dudar en que ésta es una opción fantástica, que te beneficia tanto a ti como a tu caballo.

Para cualquier duda al respecto, podéis escribir vuestras dudas o consultas al correo electrónico goodvibes.equitacion@gmail.com, y os contestaremos enseguida.

Fuente: www.equisens.es/