Don Oscar y Margarita, siento mucho la muerte de la Serenata. Yo se lo que quisieron a esta yegua que nunca vendieron.
Tuve la fortuna de verla competir y de montarla. Extraordinaria trochadora, con excelente cadencia, compensación, suavidad, mansedumbre y buena clase.
Tuvo unos hijos muy destacados en calidad. En gran parte por ella le cogí a Poema dos crías y de verdad que me satisfizo totalmente con lo que me dio.
Afortunadamente fue prolífica y nos dejó descendientes de donde escoger.