Hay Dios, una vez mas se comprueba que extra con extra no da extra, uno ya no sabe ni que hacer a la hora de castar una yegua, mirando estas cifras, queda uno loco y desilusionado, esto es Dios y suerte, se ven mejores resultados entre yeguas cumplidoras, con condiciones pero no extras cruzadas con los caballos élites, muy complicado esto para los que nos gusta criar pero el gusto le puede mas a las dificultades y a los malos resultados.
Si, como no ! O sino pregúntele a Caín, Ónix, Príncipe de la Macarena, Encanto, Milagroso, La Explosiva, Talibán, Renegado, Hermano Sol, La Adoración, Zeus, Relicario, La Cariñosa, La Locura, La Reelegida, Premio Mayor, La Magnifica, Tourbillon, La J de la Alquería, Polémico, Pretenciosa, Martín Fierro, Prepotente, Jerarca, Apolo, Rey de Reyes, Paulina, Nueva Maravilla... Y sigan ustedes si quieren con la lista de ejemplares superiores hijos de don y doña. Lo que pasa es que llevar a un caballo o yegua o la fama competitiva depende de muchas cosas, genética, levante, manejo, alimentación y suerte, para que no se malogren en el camino. Pero que algunos potros hayan quedado en el intento por alguna falencia en su manejo no quieren decir que se les haya negado su herencia, la capacidad genética de sus padres.