Autor Tema: ENGANCHE ROTULIANO O SINDROME DE FIJACION DE LA PATELA (ROTULA)  (Leído 15987 veces)

Desconectado Afetrujillo

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ENGANCHE ROTULIANO O SINDROME DE FIJACION DE LA PATELA (ROTULA)
« : Septiembre 22, 2018, 10:30:24 am »
Parte normal de criar caballos es empezar a ver enfermedades de todo tipo en nuestros caballos, yeguas y potros. En los ultimos 3 meses me ha tocado ver una claudicacion en los posteriores de un potro de 18 meses. Se ha llegado al diagnostico de Enganche Rotuliano o Sindrome de fijacion de la patela o rotula. Dejo un texto publicado en la web para conocimiento del tema y esprando si algun forista tiene alguna experiancia que nos pueda compartir.


SINDROME DE FIJACION DE LA PATELA
Hank Lee, DVM

Fijación de la patela es una condición reconocida en los equinos por mucho tiempo y precede a los textos veterinarios escritos. El problema es fácil de reconocer porque uno, o los dos miembros posteriores se ponen tiesos o tensos, resultando en el arrastramiento de los cascos posteriores. Muchos dueños de caballos con alguna experiencia han visto o al menos oído acerca de esta condición. Este problema es también conocido como “fijación patelar” o “patela trabada o fijada”. En este articulo describiré una variante de esta condición conocida como” Fijación Superior de la Patela o “ sticky stifles”. Yo generalmente me refiero a la condición usando el anglicismo abreviado IUFP.

En orden de poder entender IUFP, hay que entender la relación normal de las estructuras anatómicas que están envueltas. En los equinos el “stifle” es análogo a la rodilla de los humanos y tenido varias adaptaciones evolutivas que son únicas y permiten a los caballos fijar un miembro posterior (pata), y en esta forma estar parados distribuyendo el peso con esfuerzo muscular mínimo. Nosotros llamamos este mecanismo el Aparato de Postura Pasiva de los miembros posteriores.

Este aparato de postura pasiva consiste de un sistema de ligamentos, tendones y estructuras oseas (huesos) que son puestas en acción basándose en la posición de la patela (también llamada rotula) y su relación con el huesos llamados el fémur y la tibia. Come se ve en la ilustración tomada del texto de Sisson’s “The Anatomy of the Domestic Animal” (“La Anatomía del Animal Domestico,” edición de 1910), tres tendones se originan en el borde inferior de la patela (o rotula). Se los llama ligamentos patelares lateral, medio y medial. Todos tres ligamentos se insertan distalmente en un hueso llamado la tibia. Durante el caminado normal, la contracción de los músculos de la pierna transfiere tención a la patela y a los ligamentos antes mencionados para producir tensión en la tibia, resultando en el enderezamiento de la articulación de la rodilla y del miembro posterior, en forma similar a lo que ocurre en las piernas del lector cuando estando sentando en una silla tensiona los músculos anteriores del muslo para enderezar la pierna. Cuando un caballo decide descansar una pata entonces consiente o subconscientemente endereza el otro miembro posterior, contrayendo los músculos del muslo, moviendo la patela hacia arriba y encima de la articulación para permitir en esta forma que se enganche sobre el borde medio troclear del fémur. En este momento el animal permite la flexión de la rodilla con la patela en esta misma posición distribuyendo su peso en las estructuras de la rodilla ya fijada, parándose quieto con el peso distribuido en los “cables y bloques” (músculos, ligamentos y tendones), y permitiendo al otro miembro posterior descansar en la punta de su casco. La activación inadvertida de este mecanismo durante el caminado es lo que resulta en el síndrome de fijación de la patela o IUFP.

Este síndrome de patela o rotula fija (IUFP) se presenta generalmente como un déficit moderado en el movimiento de paso de los miembros posteriores, resultando en una cojera involuntaria, consecuencia de la rápida e involuntaria fijación y des fijación de la rodilla durante el movimiento del paso. En nuestra experiencia muchos dueños de caballos se quejan de una cojera moderada en la que el animal arrastra levemente el casco posterior, o dejando caer el anca cuando el animal esta bajo silla. En mi experiencia este problema se puede exacerbar durante el examen haciendo trabajar el caballo en un terreno inclinado, haciéndolo mover hacia arriba y hacia abajo, o también haciendo figuras de ocho apretadas bajo silla.

Cuando el IUFP se considera como una posibilidad diagnostica, el animal se debe examinar buscando las causas posibles para la ocurrencia de esta condición, muchas de estas causas son frecuentes y pueden resultar en la fijación de la rodilla secundariamente a dolor o inflamación. En nuestra practica esta evaluación incluye un examen cuidadoso para cojera y frecuentemente radiografías o examen de la rodilla con ultrasonido. Una vez que otras causas son descartadas y se concluye que IUFP es el problema principal nos podemos concentrar en el tratamiento.

Las opciones de tratamiento se basan en una variedad de factores, incluyendo la severidad de la condición, edad del animal, la historia de las condiciones de trabajo del caballo y el uso que se le ha dado. Caballos jóvenes y caballos a los cuales se les ha cambiado la intensidad del trabajo repentinamente son tratados inicialmente con medicamentos anti-inflamatorios y con un programa controlado de ejercicios dirigidos a fortalecer los músculos de los miembros posteriores. Animales adultos que ya están acostumbrados a sus asignadas disciplinas y tareas, y los caballos que no respondieron al tratamiento con medicaciones son entonces candidatos para una de las opciones quirúrgicas disponibles.

Los tres mas comunes procedimientos quirúrgicos usados por veterinarios para tratar IUFP son división del ligamento medial de la patela (cortando el ligamento medial), inyecciones de anti - inflamatorios y fenestración (separación de las fibras) del ligamento patelar medial. La clase o tipo de procedimiento que se usara se basa en la opinión y el consejo del veterinario y la preferencia del dueño. En el pasado IUFP se ha tratado frecuentemente con la división del ligamento medial. Hasta hace poco tiempo, muchos textos de veterinaria indicaban este procedimiento como la opción quirúrgica mas aconsejable. En este procedimiento como se explico anteriormente el ligamento patelar medial se divide completamente y consecuentemente el aparato de postura pasiva del miembro se hace inoperable temporalmente; con el tiempo se forma una cicatriz que ensancha el ligamento patelar medial haciendo la fijación inadvertida de la rodilla poco probable. El procedimiento lleva con sigo un efecto colateral indeseable que puede ser muy serio. Cuando se corta el ligamento medial esto resulta en el uso exagerado del ligamento medio (ver ilustración), este uso excesivo puede resultar en fragmentación/fractura de la patela en el lugar de inserción del ligamento medio. Los caballos con este problema requieren frecuentemente cirugía artroscópica mas complicada para capacitarlos atléticamente. Este resultado adverso se ha reportado en algunos estudios con una ocurrencia del 66% de los casos tratados. Esto ha resultado en que muchos veterinarios actualmente reserven el procedimiento de división medial para casos extremos, en los que los caballos tienen fijación permanente, o que no han respondido favorablemente a ninguna otra modalidad de tratamiento.

Hoy en día la mayoría de los practicantes prefieren la inyección de contrairritantes alrededor y dentro del ligamento patelar medial o la fenestración quirúrgica del mismo. La determinación final entre estos dos tratamientos es usualmente hecha por el veterinario basándose en su experiencia histórica y el nivel de confianza que tenga con el procedimiento. Ambos procedimientos resultan en formación de cicatrices del ligamento medial patelar y una disminución de la fijación inadvertida de la rodilla. Ambos procedimientos producen resultados similares a la división del ligamento, con menores posibilidades de efectos indeseados.

En nuestra practica lo que hacemos con mayor frecuencia cuando se ha concluido que un procedimiento quirúrgico es necesario, es la fenestración con el animal parado. En este caso el caballo esta sedado, la rodilla se prepara para cirugía, el ligamento patelar medial se punciona en forma de rejilla en la mayoría de su extensión, todo esto mientras el animal esta parado. Nosotros inyectamos agentes anti-inflamatorios en la articulación de la rodilla y prescribimos medicaciones anti-inflamatorias para los tres primeros días post-operatorios. Empezamos a caminar con la línea, manualmente y aconsejamos ejercicio moderado en la silla al rededor de después de una semana. Si todo anda bien se aumenta el trabajo a las dos semanas después de la cirugía. En nuestra experiencia algo mas del 90% de los casos de IUFP se resuelven con una fenestración y muy pocos requieren un segundo procedimiento después de varias semanas.